Ciudades como Paris, Londres New York, Roma, son lugares con los que todos soñamos, pero llega un momento donde sientes que debes ir mas allá de los destinos populares y aventurarte a conocer nuevos lugares y culturas. En el 2018 tuvimos nuestro primer ingreso a un país árabe y quedamos maravillados, rompimos muchos estereotipos, probamos una gama de nuevos sabores y aprendimos a manejarnos dentro de los zocos de una medina.

Una medina Árabe es una zona urbana organizada dentro de murallas, protegida por torres de vigilancia, y con enormes puertas que permiten el ingreso y la salida de la ciudad. Mayormente, las medinas son las partes más antiguas de las ciudades. En el centro de las medinas siempre hay una mezquita y desde ahi se desprende una maraña de calles, callejuelas y callejones, formando un auténtico laberinto, en el que un simple paseo se convierte a veces en un verdadero rompecabezas.

La medina de Túnez es un laberinto de calles estrechas y pasajes sin salida, que se expandieron alrededor de la Mezquita Zeytouna allá por el año 723 D.C.

En las calles se fueron estableciendo pequeñas tiendas que aprovechaban la salida de los fieles para ofrecer sus productos y con el tiempo las tiendas se fueron agrupando en zonas según su oficio y se formaron lo que hoy conocemos como zocos. Así, los perfumes se encuentran en el zoco Attarime; los frutos secos, pastas y dátiles, en el zoco Fekka; joyas de oro y plata en el zoco Nahas; joyas tunecinas con mas tradición, en el zoco Brika. 17 zocos en total.

Sus callejuelas laberintosas y bulliciosas ademas de zocos tienen bellos palacetes recién restaurados, madrazas, mezquitas, cafés, restaurantes y, por qué no decirlo, algunas casas bastante dañadas. Pero si algo caracteriza a la medina de Túnez son sus puertas. Las hay azules, amarillas y también verdes, todas decoradas con clavos negros brillantes.

Recorrer las calles de la medina y sus zocos es toda una experiencia. Es el mejor lugar para apreciar la vida real de los lugareños; ver qué comen, cómo se visten y cómo decoran sus viviendas. Es un lugar para admirar la arquitectura y descubrir las peculiaridades de cada zoco mientras los tenderos insisten en mostrar sus productos. Es un lugar para observar las divertidas escenas de regateo entre vendedores y compradores, porque en un zoco jamás se paga el precio de lista, y quien hace bien el juego puede conseguir rebajas de hasta 70%, obviamente aun nos falta mucho por aprender.

Caminando por las calles de la medina de Túnez, en el zoco Trouk, encontramos un lugar que nos gustó mucho, la tienda Ali & Yousseff conocida también como Ed Dar, la tienda es un museo de antigüedades: alfombras, lamparas, cubiertos, vajillas, tocadiscos, adornos y hasta muebles. Una maravilla!, pero lo que más nos impresionó fueron las paredes de azulejos al costado de las escaleras que te llevan a la terraza, desde donde tienes una vista completa de la medina y puedes imaginar como era la vida hace unos cientos de años. 

…y ésta es la vista desde la terraza.

Algo que nos pareció curioso es que los cafés están atestados de varones, al principio pensamos que era por la cultura árabe, pero no, aunque Túnez es esencialmente árabe, posee una sociedad abierta y moderna. En Túnez las mujeres disfrutan de libertades difíciles de encontrar en el resto del mundo árabe, como el derecho a divorciarse, a abortar, a votar, a postularse a cargos públicos, a crear empresas y a exigir salarios iguales al de los hombres. Todo ello gracias a Habib Bourguiba, el primer presidente del país después de su liberación de Francia en 1956, días después descubrimos que aparentemente las mujeres prefieren las cafeterías de la ciudad moderna. Ellas visten minifaldas, usan maquillaje y no se cubren la cabeza.

Entre los zocos se levantan casas privadas con arquitectura tradicional del norte de África, construidas durante los últimos siglos. Estas hermosas mansiones ahora albergan asociaciones e instituciones públicas. Algunas están abiertas al público y valen la pena ser visitadas, entre ellas están: Dar Hussein, Dar Lasram y Dar Romdhane Bey …

Qué comer en Túnez

Al igual que el resto de países mediterráneos, la cocina tunecina utiliza el aceite de oliva, las especias y los tomates en gran cantidad. Sus platos se basan en verduras, carne vacuna, cordero, camello en el sur, o pescado en la costa, acompañados de cuscús o pasta.

La salsa harissa es el condimento mas popular, preparado con guindilla molida y ajo, se sirve como aperitivo en un plato con aceite de oliva, aceitunas y pan baguette. Lo que no puedes dejar de probar es:

Tabouna es el pan mas común en la calle, un pan redondo, plano y pesado, que recibe su nombre del horno circular de arcilla enterrado en el suelo con el que se hace. 

Briq, una empanadilla grande de fino hojaldre rellena de un huevo con la clara cocida y la yema liquida. Puede llevar además queso, atún o algo de carne o marisco.

Chorba es la sopa picante hecha con caldo de pollo o cordero.

Tajine, quiche gratinado rellena de patata, verdura, queso y carne. 

Té con piñones

Otras cosas que ver en Tunis

Sidi Bou Said

Sidi Bou Said es un pueblo pequeño de casas blancas con techos y ventanas azules, construidas en una colina. Es tan pequeño que puede visitar todas sus calles  en no más de dos o tres horas. Desde lo mas alto se tiene una vista increíble del Mar Mediterráneo y la Bahía de Túnez.

Sidi Bou Said está conectado con el centro de Túnez por el tren regular, conocido como TGM. El viaje dura aproximadamente 35 minutos.

Cosas que ver y hacer en Sidi Bou Said

Visitar el Family House
Una casa antigua convertida en museo, que muestra la vida tradicional de un abogado tunecino del siglo XVIII, vale la pena visitarla.

Detenerse en Café des Nattes
Una cafetería típica árabe.

Maravillarte con La casa de Baron Rodolphe d’Erlanger

El palacio es un testimonio del amor del barón por la cultura árabe. Su arquitectura neo-morisca rinde homenaje a las técnicas de construcción ancestrales de Arabia y Andalucía, con una hermosa entrada arqueada y asombrosos ejemplos de tallas de madera artesanales, yeserías y mosaicos.

THE MEDITERRANEAN SEA

Los pueblos pesqueros más populares son: Gammarth y La Marsa (muy cerca unos de otros), donde los tunecinos se reúnen los fines de semana y los días de verano, tratando de escapar del caluroso verano tunecino y del ajetreo de la ciudad.

Los imprescindibles son: Café Saf Saf (donde el agua es bombeada por un camello que gira alrededor de una rueda durante todo el día) y el Palacio Abdalliya, un monumento nacional.

Carthage

Cuando se canse de caminar, visite la casa del barón Rodolphe d’Erlanger. Nombrado Ennejma Ezzahra, o Sparkling Star, el palacio es un testimonio del amor del barón por la cultura árabe. Su arquitectura neo-morisca rinde homenaje a las técnicas de construcción ancestrales de Arabia y Andalucía, con una hermosa entrada arqueada y asombrosos ejemplos de tallas de madera artesanales, yeserías y mosaicos.

Sidi Bou Said está conectado con el centro de Túnez por un tren de cercanías regular, conocido como TGM. El viaje dura aproximadamente 35 minutos. Las personas con movilidad reducida deben tener en cuenta que es un paseo empinado desde la estación de tren hasta el corazón del casco antiguo.

Casa de familia. Una casa antigua convertida en museo, que muestra la vida tradicional de un abogado tunecino del siglo XVIII. De propiedad privada y mantenida por sus descendientes, vale la pena visitarla. Está a su izquierda al entrar en el pueblo.

Café des nattes Una cafetería típica árabe. Ubicado en la cima del cerro del TGM (tren). Mucho más barato que las delicias de los cafés y también más tradicional. Shisha por 3 dinares, té de menta por menos de un dinar.

Café Delices. La mejor vista en Sidi Bou Said. Tenga cuidado, si no sabe el precio, los camareros intentarán conspirarlo para obtener más dinero. Las bebidas son muy caras aquí (¡5 dinares por botella de agua!), Básicamente, estás pagando por la vista. editar 

Beach

Most popular local beaches are La Marsa (I really fun area at night too) and Gammarth (this is the ‘swanky’ area of Tunis, lots of upscale restaurants and nice houses) and La Goulette (10 mins by train to downtown). 

la gastronomía tunecina se podría definir como una mezcla de la cocina mediterránea que puedes encontrar en el sur de Italia o en Grecia con la cocina árabe y del norte de África. Es decir, ingredientes frescos, elaboraciones con especias pero aptas para todos los paladares y mucha fruta y verdura.

Túnez, como todos los país del Mediterráneo, utiliza el aceite de oliva, las especias y las verduras, pero también emplea ingredientes algo diferentes a los que conocemos 

Destacan las recetas elaboradas con cuscús, el plato estrella, realizado a base de sémola de trigo con cordero, con pollo o con pescado, y platos como la mechoui, una ensalada tunecina, el lablabi a base de garbanzos, los briks que son empanadas, lameloukhia, un plato hecho de carne de cordero estofada con una deliciosa salsa verde, y los tajines, una especie de quiche gratinada. Por último, los postres como el makhroud –pastelitos elaborados con dátiles– o el buze –crema de sémola cubierta de nueces–, entre muchos otros.

a typically Tunisian brick (a fried phyllo dough pocket with an over-easy egg inside that you squeeze a lemon over)